En IMPERDÓN, S.L. somos conscientes de la necesidad de que toda nuestra gama de productos sean respetuosos con el medio ambiente, para mejorar la calidad de vida en nuestras viviendas. Damos mucha importancia a la necesidad de tener las marcas más punteras, con la tecnología más avanzada, para satisfacer las necesidades de nuestros clientes.
En IMPERDÓN, S.L. somos conscientes de la necesidad de que toda nuestra gama de productos sean respetuosos con el medio ambiente, para mejorar la calidad de vida en nuestras viviendas. Damos mucha importancia a la necesidad de tener las marcas más punteras, con la tecnología más avanzada, para satisfacer las necesidades de nuestros clientes.
Lo importante es tener un buen sistema de aislamiento en nuestras viviendas.
Para muchos sigue siendo un gasto que «no quieren asumir, cuando en realidad es una inversión. Es el único gasto en construcción que se amortiza desde el primer momento»
“Según BBVA, se calcula que con un aislamiento adecuado de cubiertas y fachadas de un bloque de viviendas, se puede reducir su consumo energético entre el 50% y el 65%”. El mismo comunicado señala que este gasto de energía “supone hasta un 13% de los gastos que se tienen en el hogar”.
Y es que los edificios mal aislados térmicamente tienden a consumir más volúmenes de energía, ya que en invierno se enfrían rápidamente y pueden aparecer condensaciones en el interior. En cambio, en verano, el calor se acumula más y en menos tiempo.
Las acciones aisladas funcionan: buen aislamiento térmico – bajada de termostato. Una casa o construcción mal aislada equivale a más dinero gastado y a más emisiones de CO2.
Lo importante es tener un buen sistema de aislamiento en nuestras viviendas.
Para muchos sigue siendo un gasto que «no quieren asumir, cuando en realidad es una inversión. Es el único gasto en construcción que se amortiza desde el primer momento»
“Según BBVA, se calcula que con un aislamiento adecuado de cubiertas y fachadas de un bloque de viviendas, se puede reducir su consumo energético entre el 50% y el 65%”. El mismo comunicado señala que este gasto de energía “supone hasta un 13% de los gastos que se tienen en el hogar”.
Y es que los edificios mal aislados térmicamente tienden a consumir más volúmenes de energía, ya que en invierno se enfrían rápidamente y pueden aparecer condensaciones en el interior. En cambio, en verano, el calor se acumula más y en menos tiempo.
Las acciones aisladas funcionan: buen aislamiento térmico – bajada de termostato. Una casa o construcción mal aislada equivale a más dinero gastado y a más emisiones de CO2.